La operación SOGA (acrónimo del inglés soccer gambling, apuestas en el fútbol) se centra en las apuestas ilícitas, el amaño de partidos y las actividades conexas de blanqueo de capitales. Se lleva a cabo de forma periódica, y está programada para coincidir con grandes eventos futbolísticos internacionales. Los corredores de apuestas y los apostadores que levantan sospechas y los posibles blanqueadores de dinero son identificados gracias a un análisis minucioso y al intercambio de información, y a continuación son detenidos en una actuación simultánea en la que se asesta un duro golpe a los grupos delictivos. Entre noviembre de 2022 y enero de 2023 se ejecutó la operación SOGA IX, bajo la dirección del equipo especial conjunto creado por INTERPOL para la Copa Mundial de Catar 2022. Diecinueve países participaron en esta actuación coordinada a escala mundial, en el marco de la cual se produjeron 1 200 detenciones y se incautaron bienes de diversa naturaleza: 2 millones de dólares estadounidenses; 76 millones de dólares estadounidenses en registros de apuestas en línea; ordenadores, teléfonos móviles, tarjetas de crédito, vehículos de lujo, joyas y bolsos. Los investigadores descubrieron nuevas tendencias, como la clara preferencia por las apuestas por Internet, las apuestas de cantidades bajas para evitar su detección, y la evidencia de que las personas que más interesa vigilar son los hombres menores de 40 años. Las nueve ediciones de la operación SOGA de INTERPOL han dado lugar a la realización de 20 300 detenciones, la incautación de 64 millones de dólares estadounidenses en efectivo, y el cierre de más de 4 000 casas de apuestas ilegales que manejaban apuestas por un valor de más de 7 300 millones de dólares estadounidenses. Además, las sanciones administrativas impuestas hasta ahora por actividades de juego ilegal ascienden a 4,5 millones de euros.